Existen situaciones económicas y laborales complicadas en donde es necesario solicitar financiación, pero, ¿cómo hacerlo sin un sueldo fijo al mes? En este artículo te contamos cómo pedir un préstamo sin nómina, sigue leyendo.
Hay diversos tipos de préstamos: préstamos de capital privado, préstamos hipotecarios, préstamos de estudios... Pero, ¿habías escuchado sobre los préstamos sin nómina o aval?
Aunque parezca algo imposible, debemos decir que sí se puede pedir un préstamo sin nómina. Hoy en día existen diversas entidades que dan respuesta instantánea a este tipo de solicitud y se le otorga a personas que se encuentran en una necesidad de financiación y que además están en situación de desempleo, son trabajadores temporales, autónomos o están jubilados.
Este tipo de préstamo no requiere de una nómina como requisito pero sí es necesario brindar información respecto a los ingresos que se tengan, los cuales deben ser periódicos, regulares y suficientes para afrontar el pago. De esta forma se comprueba la liquidez y posibilidades de cumplir.
Dependiendo de la entidad donde hagas la solicitud, los requisitos para solicitar este tipo de préstamos puede variar, pero algunos generales son:
Para agilizar el proceso, algunas financieras tienen la opción de hacer esta solicitud vía online. Se cumplimenta un formulario y se envía para que, posteriormente, se evalúe y se tenga una respuesta inmediata.
Sus ventajas son diversas:
Es importante tener en cuenta que, si decides pedir un préstamo sin nómina, es preferible que selecciones una financiera regulada por las normativas que establece el Banco de España. De esta forma te aseguras que tus operaciones son transparentes y están avaladas por dicha entidad.
Las financieras ofrecen de 50€ a 1.000€, o más. Si es tu primer préstamo, te dan una cantidad mínima sin intereses y sin comisiones. A partir del segundo préstamo la cantidad se eleva, con el fin de garantizar que la persona interesada podrá pagar la cantidad pactada.
La devolución es tan inmediata como la solicitud. En algunas entidades financieras se pide que se reembolse a la misma cuenta bancaria en la que se recibió el dinero.
Cuando no se puede devolver el dinero en el tiempo estipulado las financieras cuentan con políticas de renovación para aplazar el pago, aunque esto conlleva un aumento en las comisiones o intereses.
Si estás pensando en pedir este tipo de préstamo, es necesario que evalúes si puedes afrontar el pago del mismo, con la finalidad de conseguir seguridad económica y únicamente hacerlo en caso de una urgencia. Te sugerimos asesorarte, escoger la entidad bancaria o financiera de tu preferencia y tomar la mejor decisión en beneficios de tu situación económica.
Queremos explicarte el caso de Luis Pita...
Mi nombre es Luis y mi libertad financiera es de 14 años. Es decir, si mañana dejase mi empleo, podría mantener el mismo nivel de vida sin trabajar hasta 2038.
Soy autor del best seller “Ten peor coche que tu vecino” y me has visto enseñando ahorro y finanzas personales en TVE, Telecinco, Cuatro, La 2, Telemadrid y las principales radios.
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