¿Quién no se ha equivocado alguna vez al emitir una factura? ¿Tienes claro qué tienes que hacer cuando esto ocurre? ¿Puedes anular la factura errónea? Si no tienes claro cómo subsanar esta incidencia y/o te preguntas qué es eso de factura rectificativa o factura de abono, sigue leyendo y te lo aclaramos. El proceso para modificar una factura que contiene un error no es complicado ni complejo, pero como siempre, tratándose de un documento oficial, hay que ser escrupulosos con los requisitos para que Hacienda no nos llame a filas.
Una factura rectificativa es una factura que modifica, ampliando o eliminando algún dato de una factura original que ha sido emitida previamente. Así, si emites una factura y detectas que hay algún tipo de error, la forma de subsanarlo será emitiendo una nueva factura que modifique la primera. Desde que entró en vigor el Reglamento de facturación (Real Decreto 1619/2012, de 30 de noviembre) se entiende que una factura de abono es igual a una factura rectificativa, no existiendo diferencias entre ambas.
Los motivos para emitir una factura de abono son cualquiera de los siguientes:
También se puede emitir una factura rectificativa para recuperar el IVA de una factura que no hemos podido cobrar, pero en estos casos la ley exige que se cumplan una de estas dos condiciones:
Debes emitir una factura de abono en cuanto te des cuenta del error en la factura original y siempre dentro de los cuatro años posteriores a su devengo. Los requisitos para emitir una factura rectificativa son:
Como hemos comentado los motivos para emitir una factura rectificativa pueden ser varios, en función de lo que queramos modificar. Imagina que emites una factura con un error en los datos identificativos del cliente. En cuanto identifiques dicho error deberás emitir y enviar al cliente una factura rectificativa donde se indiquen los datos de la original y se hayan subsanado los errores de información. En este caso, la factura que tendrá validez será la rectificativa. Ahora veamos el ejemplo de que existe un error en el precio aplicado a un producto en las cantidades vendidas. Al igual que en el caso anterior, la forma correcta de subsanar el error es emitir una nueva factura de abono, en este caso tienes dos opciones.
Lo vemos con un ejemplo para que quede más claro. Pepe, S.L. factura 6 latas de pintura a 5,50 euros cada una. Tras enviar la factura al cliente, se da cuenta que el precio real era 6,50. A la hora de emitir la factura de abono podrá:
En ambos casos la factura de abono debe hacer referencia a la original y cumplir los requisitos que hemos citado anteriormente.
Debes ser riguroso con la emisión de tus facturas rectificativas y en ningún caso utilizarlas para anular una factura y emitir días después otra por la misma operación. Hacienda te puede pedir cuentas sobre los motivos de emitir tus facturas de abono así que cuando las emitas deben ser por un motivo real, de peso y que tenga justificación económica.
Queremos explicarte el caso de Luis Pita...
Mi nombre es Luis y mi libertad financiera es de 14 años. Es decir, si mañana dejase mi empleo, podría mantener el mismo nivel de vida sin trabajar hasta 2038.
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