El cambio implica movimiento

El cambio implica movimiento

María López López nuestra surfer preferida se quedó en las semifinales de la competición y es que según su entrenador Daniel Martín "María esta en plena adolescencia, viviendo un montón de cambios y todo eso se está notando en sus resultados".  

María ya tiene 16 años y esta en plena adolescencia. La palabra adolescencia proviene del verbo latino "adolesco" que significa crecer, desarrollarse, ir en aumento y es que, quizá, en esta etapa de la vida es cuando las personas atravesamos el momento más drástico tanto de formación del carácter como de creación de nuestra propia personalidad.  

La Adolescencia es Confusa un "Totum Revolutum" 

A pesar de las percepciones negativas que tienen algunos adultos sobre los adolescentes, estos suelen ser personas enérgicas, con ganas de comerse el mundo, idealistas... y tienen gran interés por lo que es justo y correcto.  

Es un periodo de aprendizaje, de maduración un tiempo que marcará las bases sobre las que se sustente lo que se convertirán en el futuro. 

Los chic@s de esta edad a menudo empiezan a notar cambios en su apariencia física, estilo e identidad, adquieren mayor conciencia de los aspectos en los qué difieren con los demás y esto puede generar momentos de tensión y conflicto con sus seres más cercanos y queridos. 

Quieren "probar" todo y esto produce miedo y preocupación para los adultos que con más experiencia -que no es otra cosa que haber vivido situaciones similares-procuran avisarles de que sus acciones siempre tendrán consecuencias, por ello, han de tener cuidado con lo que hacen porque "no es indiferente lo que elijan hacer con su vida".  

Para un adolescente, la principal meta es lograr independencia, por eso se alejan de sus progenitores o tutores, pasan menos tiempo con, hasta entonces, sus mayores referentes y se centran más en el apoyo de sus propios amigos.  

A medida que van madurando, los adolescentes empiezan a pensar de un modo más abstacto y racional, formando su propio código ético, su propia escala de valores.  

Y es que los cambios implican movimiento pero esos movimientos forman parte del desarrollo y crecimiento personal, no es negativo ser flexible en estos casos, permitir que se tomen decisiones no siempre acertadas y dejar que corra  "un poco de aire". Estar siempre cerca pero siendo conscientes de que esa persona esta dejando de ser un niñ@ y se esta transformando en un adult@. 

En Barymont abogamos por el cambio constante que nos permita avanzar y descubrir nuevas realidades. Adoptamos los que creemos mejores resultados e intentamos desechar los que quedan obsoletos. El mundo se mueve y nosotros queremos ser partícipes de ese movimiento. Gracias María, una vez más, nos haces poner el foco en lo importante. Seguimos a tu lado, queremos ser partícipes de tu cambio y desarrollo. No te limites y haz realidad tus sueños.  

¡A por ello, campeona!

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