Cuando se piensa en invertir, solemos pensar que es necesario una cantidad importante de dinero. O si no es una gran cantidad, se tiende a creer que no habrá rentabilidad. Pero queremos explicarte que, aun con poco dinero, las inversiones generan beneficios sea cual sea el importe que inviertas. Y aquí también entra en juego el tiempo que estés invirtiendo. Sigue leyendo y descubre cómo es una inversión con poco dinero.
¿Qué tipos de inversión con poco dinero son las mejores?
Cuando no se tiene mucho dinero, hay dos factores que tienes que tener en cuenta: cuándo empiezas a invertir, es decir, el tiempo; y la relación riesgo/beneficio. Si has tomado la decisión de invertir, lo mejor es empezar cuanto antes. Y lo más seguro es invertir en productos que puedan darte un beneficio sin arriesgar mucho, aunque el beneficio sea menor con respecto a otros productos.
Antes de comenzar con ejemplos de inversión con poco dinero, debes tener presente que solo debes invertir dinero que estés dispuesto a perder, y que no necesites en un periodo de tiempo. Esto es muy importante en cualquier inversión, sea de riesgo alto o de riesgo bajo. Porque siempre hay riesgo de perder el dinero que has invertido.
Un ejemplo para ver la importancia de comenzar a invertir cuanto antes, y que con poco puedes ir generando beneficios, son los productos que te ofrecen interés compuesto:
- Estos productos te dan una rentabilidad fija en tu inversión.
- Los beneficios pueden ir sumándose a la inversión inicial e ir generando más ingresos una vez estén dentro de la inversión.
Ejemplo: imagina que Pepe Promedio deposita 6.000€ en una cuenta ahorro que le da un 6% anual de beneficios. El primer año se generan unos beneficios de 360€. Si estos beneficios, los reinvierte en lugar de sacarlos, el segundo año el 6% se calculará sobre 6.360€ en vez de los 6.000€ iniciales. Con el paso del tiempo, la cantidad irá aumentando, por lo que el beneficio final de Pepe será mucho mayor.
La regla del 72, tu mejor herramienta
A raíz de esto, existe una famosa regla: la regla del 72. Esta regla demuestra el efecto que tiene el interés compuesto en una inversión. Aproximadamente, el dinero de la inversión se duplicará en un periodo que sabremos si dividimos 72 entre el interés que tenga el producto financiero. Es decir, si el producto da un interés del 6% como en el ejemplo anterior, se divide 72/6 y se obtiene 12. Este resultado significa que en 12 años aproximadamente tendrás el doble de lo invertido, en el caso del ejemplo, 12.000€.
Del mismo modo, puedes intentar averiguar el interés que necesitas para doblar cierta cantidad en un periodo determinado. Es decir, si quieres duplicar tus 6.000€ en 20 años, debes tener un interés del 3,6%. Esto se calcula dividiendo 72 entre el número de años, en este caso 20.
La promediación en la bolsa como estrategia
Otra método que puedes poner en práctica a la hora de hacer una inversión con poco dinero, en este caso en bolsa, es usar la promediación. En bolsa son dos técnicas muy utilizadas: la promediación al alza y a la baja. En lugar de hacer una única compra con todo el capital, se trata de ir comprando en diferentes momentos, para hacer una promediación.
Por ejemplo, si tienes 2.000€ para invertir en acciones de una determinada empresa, puedes comprar la mitad cuando cuestan 10€. Y luego invertir la otra mitad en otro punto. Si el valor va al alza, comprar en 12€ y tendrás 2.000€ en acciones a un precio de 11€. O al revés, si va a la baja, comprar en 8€ y la promediación será de 9€. Las dos estrategias tienen sus beneficios y sus riesgos, pero si tienes un buen estudio de mercado, es una buena opción para invertir poco capital. Hacerlo en partes y no todo de golpe.
Aunque pudiera parecer que la inversión con poco dinero no es rentable, si la haces con cabeza y bien asesorado puede ser un gran beneficio a largo plazo. Lo principal para comenzar con poca cantidad es no arriesgar y contar con asesoramiento y un plan a nuestra medida.
