Para comprar una casa, para arreglar una avería urgente en el coche, para pagar los estudios universitarios de tus hijos… hay muchas razones que te pueden hacer recurrir a las entidades financieras en busca de un préstamo. No en todos los casos vas a necesitar la misma cantidad ni te van a exigir las mismas garantías, pero sí hay una serie de trucos para que te concedan un préstamo que te lo pueden poner un poco más fácil.
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No pidas más de lo que necesitas
No es nada extraño acudir al banco a pedir un préstamo e inflar un poco las cantidades. El típico caso de quien va a gastar 15.000 euros en reformar la cocina y aprovecha y pide 3.000 euros más para sufragar las vacaciones.
La entidad bancaria va a mirar con lupa el destino que vas a darle al dinero, así que asegúrate de que puedes justificarlo todo. Por ejemplo, presentando el presupuesto del proyecto en el que vas a gastar el capital prestado. Si la entidad bancaria ve que no estás pidiendo de más, empezará a mirarte con buenos ojos.
Además, asegúrate de que la cantidad que solicitas sea un dinero que puedes devolver. Podrías justificar que necesitas 500.000 euros para un negocio, pero quizá tu patrimonio y tu nivel de solvencia no sean suficientes como para que puedas devolver semejante cantidad más los intereses correspondientes.
No figures en un fichero de impagados
RAI, ASNEF y similares son ficheros de impagados o de morosos. Si constas en alguno de ellos es porque le debes dinero a alguna empresa (salvo que se trate de un error).Y puedes tener por seguro que los bancos revisan estos registros antes de tomar una decisión.
De ahí que uno de los mejores trucos para que te concedan un préstamo sea no constar como moroso en ningún sitio. Por eso, si tienes alguna deuda pendiente, asegúrate de liquidarla antes y de comprobar que tu nombre ya no figura en ningún fichero de morosos.
Acude a un banco que ya te conozca
A la hora de pedir un préstamo revisa muy bien el TAE aplicable para ver qué opción te compensa más. Pero no descartes la posibilidad de acudir en primer lugar a tu banco de referencia.
Tu entidad ya te conoce, sabe el dinero que ingresas, los gastos mensuales que tienes y cómo manejas tu dinero. Si haces una gestión adecuada de tu recursos económicos, ya tienes mucho camino recorrido para que tu banco te conceda el préstamo que necesitas.
Demuestra que eres una persona solvente
No se trata solo de que no seas moroso y tu nivel de endeudamiento sea comedido, también de que tengas unos ingresos regulares y algunos ahorros. Esto le demuestra a la entidad bancaria que eres una persona solvente.
Y si algo le gusta a los bancos son las personas solventes, así que si cumples estos requisitos seguramente no tendrás ningún problema a la hora de acceder a un préstamo personal o incluso hipotecario.
Estos trucos para que te concedan un préstamo te permitirán presentarte ante la entidad bancaria como un cliente digno de confianza, que sabe gestionar el dinero y que podrá devolverlo sin mayores problemas. En cualquier caso, lo mejor es que tengas que recurrir a la financiación externa lo menos posible, porque los préstamos tienen un coste extra que vas a pagar en forma de intereses. Por eso, es recomendable que te pongas en manos de asesores que te ayuden a gestionar tu dinero para que tengas que recurrir lo menos posible a los bancos a pedir dinero.
