Si quieres contratar un producto para asegurar el futuro de tu familia es posible que tengas en mente el mejor seguro de vida, pero, ¿cómo reconocerlo? Con la cantidad de productos de este tipo que hay en el mercado, no siempre resulta sencillo encontrar el más adecuado.
No te preocupes, hoy vamos a contarte qué es lo que debes tener en cuenta antes de contratar y qué características debes buscar en una póliza de vida para que resulte perfecta para ti.
¿Qué es un seguro de vida?
Es una póliza que, en caso de que fallezcas, se compromete a entregar una determinada cantidad de dinero a quienes tú como titular hayas escogido como beneficiarios. En muchos casos la póliza incluye también cobertura en caso de que te reconozcan una incapacidad permanente, siendo tú quien cobrará el dinero.
Si deseas saber más sobre este producto, échale un vistazo a nuestro artículo sobre las coberturas del seguro de vida.
¿Cómo contratar el mejor seguro de vida?
Lo primero que tienes que hacer es tener claros algunos conceptos fundamentales relacionados con este tema, para que cuando oigas hablar de ellos sepas bien de qué se trata.
- Cobertura: es el riesgo o riesgos específicos frente a los que te protege la póliza.
- Póliza: es el documento que especifica las condiciones de contratación, señalando tanto tus derechos y obligaciones como los de la aseguradora.
- Beneficiario: es la persona que va a cobrar el dinero del seguro si se produce el riesgo asegurado.
- Prima: es la cuantía que pagas por contratar la póliza. Suele ser mensual, trimestral, semestral o anual.
- Capital asegurado: importe que recibe el beneficiario si se produce el riesgo asegurado.
Revisa bien las coberturas
Cuando se trata de encontrar el mejor seguro de vida tienes que prestar especial atención a las coberturas que te ofrece cada una de las pólizas que estés comparando. Lo más normal es que un seguro de este tipo ofrezca una indemnización en caso de fallecimiento del titular e indemnización si se produce una invalidez absoluta que impida trabajar.
Pero poco a poco empiezan a aparecer en el mercado pólizas de vida cada vez más completas que incluyen coberturas extra como poder cobrar la indemnización en caso de que el titular de la póliza sea diagnosticado de una enfermedad grave, o que cubren también los gastos de sepelio.
Cuantas más coberturas tenga un seguro más alta será la prima, así que asegúrate bien de que solo proteges aquellos riesgos frente a los que quieres tener cobertura. En caso contrario, acabarás pagando de más por un producto que no es lo que necesitas.
Escoge la modalidad que más te interese
En realidad, no existe un único tipo de seguro de vida, hay dos modalidades que son las más habituales:
- Seguro de vida riesgo: es la póliza clásica, la que abona el dinero en caso de fallecimiento del titular o invalidez.
- Seguro de vida ahorro: esta modalidad está a medio camino entre un producto de ahorro y un seguro de vida. En el seguro de vida ahorro una parte del dinero abonado por la prima va a una póliza de vida y la otra a un producto de ahorro para ir generando rentabilidad.
Acierta con la cantidad asegurada
En función del capital que decidas asegurar la prima será más o menos alta. Tan malo es dejar a tu familia desprotegida como contratar un seguro por una cantidad exorbitante, porque el pago de la prima de este último podría suponer un problema.
Para acertar con su elección, en el momento de contratar su seguro de vida Pepe Promedio
calculó el gasto medio anual de su familia y multiplicó la cifra por cinco. Así, se aseguró de que, si le ocurre algo, su familia tendrá cubiertos los siguientes años. Y lo mismo deberías hacer tú.
Lo normal es que la cantidad asegurada sea entre tres y cinco veces el gasto medio anual de la familia, no hace falta más.
Forma de pago de la prima
El último factor que debes tener en cuenta antes de contratar es asegurarte de que el pago de la prima no se va a convertir en un problema para tu economía. Procura que el importe de la póliza esté dentro del presupuesto que te hayas marcado y asegúrate de que escoges la periodicidad de pago más indicada para ti.
Si abonar la prima una vez al año supone un gran descuadre en tus cuentas, prueba a dividirla en dos pagos, en cuatro o hasta en 12.
No existe el mejor seguro de vida desde un punto objetivo, todos tienen sus cosas buenas y sus cosas malas. Pero sí hay pólizas que se adaptan mejor o peor a lo que estás buscando. Por eso, lo mejor que podemos recomendarte en este caso es que compares los productos que hay en el mercado y te informes bien sobre lo que ofrece cada póliza. Si tienes dudas, siempre puedes dejarte asesorar por especialistas en bienestar económico.
