En un mercado de la vivienda cada vez más competitivo, a muchos compradores les resulta difícil conseguir una hipoteca. Para ello, hay una serie de factores que pueden influir en la decisión de un prestamista, como el historial crediticio, los ingresos, el patrimonio, etc. Para aumentar tus posibilidades, en este artículo te compartimos algunos trucos para que te concedan la hipoteca.
Hay varias razones por las que la gente decide pedir una hipoteca. Un préstamo puede ayudar a comprar una vivienda a alguien que quizá no hubiera podido permitirse por ser un presupuesto muy elevado. Solicitar un préstamo hipotecario puede ser una decisión inteligente para muchas personas.
El primer paso es investigar y conocer qué es lo que busca la entidad bancaria: de esta manera tendrás más posibilidades de conseguir tu hipoteca. Poniéndote en el lugar de quien presta dinero te será más fácil saber en qué se fija el banco. ¿Cómo quisieras que fuera la persona a quien tienes que prestarle dinero? Efectivamente, alguien que tenga estabilidad y que sepa que puede pagar el préstamo.
Veamos, pues, algunos consejos para que te concedan la hipoteca y así cumplir uno de tantos sueños que tienes en mente:
Al solicitar una hipoteca, el banco suele exigir que ahorres un determinado porcentaje del valor de la casa para poder optar a ella. Esto se conoce como pago inicial y tiene dos finalidades:
Supongamos que deseas adquirir una vivienda con un valor de 300.000 euros: necesitarás tener ahorrados, al menos, 90.000€ (el 30%), para que los bancos te otorguen la hipoteca.
Es importante considerar que, sea cual sea la cantidad, puedas pagar las cuotas cómodamente mes a mes. Lo ideal es destinar al pago de la hipoteca menos del 35% de los ingresos totales. Cuanto menor sea este porcentaje, mejor será la percepción del banco respecto a tu capacidad de endeudamiento, ya que indicará una mayor estabilidad financiera y una menor carga de deuda. Esto puede aumentar las probabilidades de que el banco apruebe la hipoteca.
Reducir deudas existentes también puede mejorar tu capacidad de pago mensual y hacerte más atractivo para los prestamistas. Cuantas menos deudas tengas, mayor será tu capacidad de endeudamiento y mejor será la percepción del banco respecto a tu capacidad para asumir nuevas obligaciones financieras. Paga las tarjetas de crédito, préstamos personales y cualquier otra deuda pendiente. Esto no solo mejorará tu ratio de endeudamiento, sino que también incrementará tu puntuación crediticia, ambos factores clave para la aprobación de una hipoteca.
Son diversas las razones por las que es importante demostrar tu solvencia económica para que te concedan la hipoteca. Hacerlo ayuda a garantizar que el prestatario podrá hacer frente a los pagos mensuales de manera puntual. Asimismo, protege al prestamista en caso de que el prestatario no pueda hacer frente a los pagos.
Un empleo estable proporciona una fuente fiable de ingresos. Además indica que es probable que el solicitante siga empleado en un futuro previsible. En este sentido, los prestamistas desconfían de prestar dinero a alguien que pueda quedarse pronto en paro.
Un mal historial financiero puede ser una señal de alarma para los blancos, ya que puede indicar que tienes un alto riesgo crediticio. Con esto, los prestamistas evalúan si es probable que los prestatarios devuelvan el préstamo o paguen en tiempo y forma.
Pedir la hipoteca en una entidad que te conoce puede ser conveniente, puesto que probablemente ya tengas una relación establecida y de confianza con el banco, donde además podrán confirmar tus finanzas y, por tanto, el proceso puede ser más ágil.
Si estás pensando en solicitar una hipoteca, estamos seguros que estos consejos podrán ayudarte a que tu banco te la otorgue.
El proceso de aprobación de una hipoteca puede variar, pero generalmente tarda entre 2 a 6 semanas desde la solicitud hasta la aprobación final.
Los documentos necesarios incluyen identificación oficial, comprobantes de ingresos, estados de cuenta bancarios, declaraciones de impuestos, y detalles de cualquier deuda existente.
Sí, es posible, pero los prestamistas pueden requerir más documentación, como declaraciones de impuestos de los últimos años y pruebas de ingresos consistentes.
Queremos explicarte el caso de Luis Pita...
Mi nombre es Luis y mi libertad financiera es de 14 años. Es decir, si mañana dejase mi empleo, podría mantener el mismo nivel de vida sin trabajar hasta 2038.
Soy autor del best seller “Ten peor coche que tu vecino” y me has visto enseñando ahorro y finanzas personales en TVE, Telecinco, Cuatro, La 2, Telemadrid y las principales radios.
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