El blog de Pepe Promedio

Tarjetas revolving: el Tribunal Supremo pone fin a los abusos

Si en los últimos tiempos has oído hablar de las tarjetas revolving seguro que no ha sido para bien. Este producto se ha hecho tristemente célebre por haber sido el culpable de llevar a muchas personas a la ruina. Por suerte, la nueva jurisprudencia del Tribunal Supremo ha puesto fin a los abusos que estaban cometiendo las entidades de crédito.

¿No te has enterado? Vamos a ver qué ha pasado y cómo puedes reclamar si has sido víctima de intereses usurarios.

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¿Qué son las tarjetas revolving?

Una tarjeta revolving es una tarjeta de crédito con la que puedes comprar ahora y aplazar el pago en varias cuotas. Tú eliges si quieres pagar una misma cuota todos los meses hasta devolver el importe total que le debes a la entidad de crédito o si, por el contrario, quieres que la cuota sea un determinado porcentaje sobre la deuda total que tienes con la entidad de crédito.

Hasta aquí todo parece normal, ¿verdad? Pues no lo es tanto, porque cada vez que aplazas un pago debes sumarle a esa deuda unos intereses. El problema que ha habido con este tipo de tarjetas es que los intereses que aplican son demasiado altos.

Pepe Promedio, que antes no sabía tanto de finanzas personales como sabe ahora, tuvo en su momento una tarjeta revolving. Aunque no la usaba mucho, decidió emplearla para abonar una reparación urgente en su coche.

El paso por el taller le costó a Pepe 600 euros, y optó por pagar todos los meses la misma cuota de la tarjeta hasta extinguir la deuda. Lo que él no sabía es que los intereses que le estaban aplicando eran del 25% TAE, así que la reparación le acabó saliendo por 756 euros. Si hubiera escogido cualquier otra forma de financiación para cubrir ese gasto, no habría pagado 156 euros en concepto de intereses.

La jurisprudencia del Tribunal Supremo sobre las tarjetas revolving

Esto que le pasó a Pepe Promedio le ha pasado a mucha gente en España. Personas que acabaron dándose cuenta de que nunca terminaban de pagar los plazos de la tarjeta de crédito, porque no hacían más que pagar intereses, lo que hacía que la deuda principal no bajara.

Por suerte, algunos de los consumidores afectados decidieron recurrir y hoy en día todos nos beneficiamos de su valentía. Porque el Tribunal Supremo ha declarado que los intereses aplicables a las tarjetas revolving son usureros.

Si te preguntas qué es la usura, te aclaramos que es una práctica muy antigua y poco ética que consistía en prestar dinero a cambio de un interés excesivamente alto. Fenómeno que nuestra legislación prohibió hace muchos años (concretamente en 1908).

Sin embargo, parece que algunos bancos y entidades de crédito no se han dado por enterados y estaban aplicando intereses en sus tarjetas de crédito que en muchos casos superaban el 25%.

Esto no le ha gustado nada al Tribunal Supremo, que ha declarado que estos intereses tan altos son totalmente ilegales y nulos de pleno derecho.

¿Qué hacer si has sido víctima de una tarjeta revolving?

Lo primero que tienes que hacer es contactar con el servicio de atención al cliente de la entidad financiera titular de tu tarjeta y ponerles en conocimiento de la incidencia, reclamando que te devuelvan los intereses que has pagado de más.

Si la entidad no atiende a tu escrito o su respuesta es negativa, entonces puedes presentar un recurso ante el Banco de España. En caso de que sea necesario, puedes denunciar a la entidad financiera ante la Justicia, ya sabes que gracias a la jurisprudencia del Tribunal Supremo te van a dar la razón.

Lo mejor en estos casos es que te pongas en manos de especialistas en Derecho que puedan ayudarte con tu reclamación. Y lo que es mejor todavía es que te informes bien antes de contratar ningún producto de financiación, porque muchos de ellos pueden llegar a convertirse en una pesadilla. Un experto en educación financiera te ayudará a conocer las diferentes formas de financiación que tienes a tu disposición, y también te aconsejará sobre cómo organizar tus recursos económicos para que tengas liquidez suficiente y no tengas que recurrir a productos como las tarjetas revolving para conseguir dinero.

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¿Y AHORA, QUÉ DEBERÍAS HACER?

Queremos explicarte el caso de Luis Pita...

Mi nombre es Luis y mi libertad financiera es de 14 años. Es decir, si mañana dejase mi empleo, podría mantener el mismo nivel de vida sin trabajar hasta 2038.

Soy autor del best seller “Ten peor coche que tu vecino” y me has visto enseñando ahorro y finanzas personales en TVE, Telecinco, Cuatro, La 2, Telemadrid y las principales radios.

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